A veces, un día que empieza como cualquier otro puede terminar cambiando tu vida para siempre. Eso fue lo que le pasó a Guadalupe, que salió de su casa una mañana sin imaginar que no volvería. Todo comenzó con un coche detenido frente a su casa, preguntas inesperadas… y el inicio de una historia que, hasta hoy, está muy lejos de cerrarse.

En la ciudad de San Antonio, Texas a principios del 2022, una mujer entraba corriendo a una sala de urgencias cargando a su hija de cinco años en brazos. La niña estaba inconsciente y no respiraba. Mientras los médicos intentaban reanimarla, las preguntas comenzaron a surgir de inmediato: ¿qué le había pasado?, ¿cómo nadie había notado antes su condición? Lo que sí estaba claro, era que la historia de esa pequeña niña había estado marcada por el dolor, el silencio y la indiferencia de quienes supuestamente la debían de proteger.

Laura Luelmo acababa de mudarse a El Campillo, un pequeño pueblo español en donde habia comenzado un nuevo trabajo como profesora. Llevaba apenas unos días ahí, y aunque estaba lejos de casa, estaba muy entusiasmada por comenzar una nueva etapa en su vida. Pero lo que parecía el inicio de una nueva oportunidad, terminó siendo el último capítulo de su vida.

Desde que la familia de Melissa Palacios denunció su desaparición en julio del 2021, su lucha por justicia ha estado llena de obstáculos, impunidad y corrupción. A pesar de que hay pruebas que apuntan claramente hacia los responsables, parece que las autoridades están más interesadas en proteger a los agresores que en hacer justicia para Melissa, dejando a su familia librando una batalla que parece no tener fin.

El 17 de enero de 2008, en una casa del sector de Puente Alto, en Santiago de Chile, dos hermanos fueron encontrados brutalmente golpeados. Al principio todo apuntaba a que los niños habían sido daño colateral de un robo que había salido mal. Pero tendría que pasar un año para que las investigaciones descubrieran la aterradora verdad a cerca del caso.

En septiembre del 2012, un estudiante de la universidad de Florida desapareció sin dejar rastro. Lo que comenzó como una preocupación entre amigos pronto se convirtió en una búsqueda a contrarreloj que sacudiría a toda una comunidad y destaparía una historia mucho más oscura de lo que nadie imaginaba.

El 2 de febrero del 2009, en un terreno baldío de West Mesa, Albuquerque, una mujer hizo un hallazgo escalofriante. Lo que al principio parecía ser solo un hueso más en el árido desierto de Nuevo México, terminó descubriendo uno de los casos más inquietantes en la historia del estado.

Este episodio esta basado en extractos de la carpeta de investigación del feminicidio de Melani Fernanda Trejo García y en las entrevistas hechas a su padre José Ángel Trejo Morales.