『Puro Corazón』のカバーアート

Puro Corazón

Puro Corazón

著者: VibeSociety
無料で聴く

このコンテンツについて

Bienvenidos a Puro Corazón: Voces de Nuestra Comunidad—un espacio donde las voces latinas se unen para compartir historias que conectan, inspiran, y nos fortalecen como comunidad. Aquí celebramos el orgullo de nuestras raíces, destacamos a líderes que transforman, y exploramos los desafíos que enfrentamos juntos.Copyright 2024 VibeSociety 人間関係 社会科学
エピソード
  • Octavio Duran and Eduardo Salgado Break Down the Truth About Work Injuries, Culture, and Community
    2025/07/09

    Eduardo didn’t grow up planning to be a lawyer. There was no single moment when the dream clicked or the decision landed. It was more like something quiet that kept tugging at him, growing louder every time he saw his parents give to the community without asking anything in return. Both were public school teachers, and their posture toward the world, steadfast, giving, and grounded, formed the base of Eduardo’s world. So when it came time to choose a career, the choice was less about prestige and more about purpose.

    Born in Puerto Rico and raised in the suburbs of Chicago, Eduardo’s story starts in an apartment he shared with his mother and another family. “Small beginnings,” he said, with a calm pride. It’s the kind of beginning that teaches you early on the value of grit, gratitude, and showing up. Now, years later, Eduardo runs his own law office, an independent legal firm grounded in values that go far beyond profit margins or settlements.

    That commitment is most visible in his work on workers’ compensation cases. And if that sounds dry or transactional, you haven’t heard Eduardo speak about it. To him, it’s not about chasing checks, it’s about keeping families afloat. “They pay for your medical bills, 100%,” he explained. “No deductibles. No co-pays. Anything that helps you get better, to get back to work, they cover it.” He didn’t say it to flex. He said it because people need to know what’s already theirs.

    Workers’ comp isn't glamorous. It doesn’t land on billboards or make headlines. But it matters, especially for the Latino community, where many families rely on manual labor and essential work to survive. “We’re not asking for accidents to happen,” Eduardo said. “But when they do, we need to be ready.” And readiness, in his eyes, means information, clear, accessible, and compassionate.

    Eduardo doesn’t just process claims. He builds trust. “There’s no signup fee,” he said. “You don’t pay unless we win. And even then, the system’s designed so most of what comes back, comes back to the client.” That kind of transparency isn’t a tactic. It’s a principle. One rooted in community, not competition.

    He knows what it’s like to balance paperwork with purpose, to manage staff, run a business, and still find time to serve. “The hardest part?” he said, “It’s doing everything that’s not law-related.” That includes making calls to people who may never become clients, simply to help them understand their options. Because to Eduardo, giving time is part of the job.

    His voice lit up when talking about Bad Bunny, mofongo, or his mom’s coquito. But he turned serious again when discussing one of the biggest lies about work comp: that people don’t need a lawyer. “If you’re off work and you’ve had surgery, get help,” he said. “It’s not about gaming the system, it’s about protecting your ability to feed your family.”

    When asked what he tells people who are afraid to file claims, his answer was simple. “Your ability to work is everything. If you lose that, what happens to your family?” For Eduardo, it's never been about fear, it’s about dignity. About having access to care even if you’re undocumented, uninsured, or unsure where to start.

    His practice isn’t just a business, it’s a bridge. A way for people who often feel invisible to be seen, protected, and restored. Not because the law is perfect, but because someone cared enough to show up and fight for them.

    続きを読む 一部表示
    29 分
  • Héctor Quintana y Abby Torres-Tierney: Pasión por la música y valentía ante el fracaso en Puro Corazón
    2024/10/15

    Desde pequeño, Héctor Quintana supo que la música sería su destino. Creciendo en un hogar lleno de melodías y ritmos, con un padre amante de los boleros y la música tradicional mexicana, Héctor aprendió a tocar la guitarra desde los siete años y a cantar aún antes de cumplir los cuatro. Esta pasión no fue algo impuesto, sino más bien una herencia natural que fluyó por las venas de toda su familia. Héctor recuerda con cariño las tardes en su casa, donde sus hermanos mayores llegaban a tocar guitarras, teclados y bajos, creando un ambiente en el que la música era más que entretenimiento: era una forma de vida.

    Lo que distingue a Héctor no es solo su talento, sino su disposición a enfrentarse a los retos con determinación. Desde muy joven entendió que el miedo al fracaso no debía detenerlo. Para él, el fracaso es una parte fundamental del éxito, pues como él mismo menciona, "incluso desde ahí es donde se aprende". Esta perspectiva lo llevó a destacar no solo como músico, sino también como productor musical y arreglista, áreas que dominó con el tiempo y dedicación.


    Su carrera profesional despegó cuando, gracias a uno de sus hermanos, fue recomendado para una audición con la legendaria banda mexicana Maná. Lo que podría haber sido un obstáculo insuperable para muchos, Héctor lo vio como una oportunidad única de poner en práctica años de preparación. Sin temor, audicionó para la banda en enero de 2007, y un mes después ya estaba de gira con ellos por Estados Unidos. "Siempre supe que lo podía hacer", dice Héctor con confianza. Esa certeza lo ha acompañado desde entonces, permitiéndole no solo mantenerse como percusionista de Maná, sino también desarrollar otros proyectos paralelos.


    El viaje de Héctor ha estado lleno de aprendizajes, pero uno de los más importantes ha sido aceptar que siempre habrá alguien más joven o más talentoso que uno. En lugar de dejar que esto lo desmotive, Héctor insiste en la importancia de la preparación y el compromiso con el instrumento o el arte que uno elija. "Siempre va a haber un niño genio de 8 años que lo va a hacer mejor que tú", comenta con humildad. Sin embargo, añade que el secreto está en profundizar, en comprometerse de lleno con lo que uno hace, y en no tener miedo de fallar en el camino. "El fracaso es parte del proceso, y desde ahí es donde más se aprende".


    A lo largo de su carrera, Héctor ha tenido que reinventarse varias veces. No solo se ha desempeñado como cantante y guitarrista, sino que tuvo que aprender desde cero a tocar percusiones para Maná, un reto que asumió con valentía. Esta capacidad de adaptarse y aprender le ha permitido mantenerse vigente en una industria tan competitiva como la música.


    Para aquellos jóvenes que sueñan con una carrera en la música, Héctor ofrece un consejo valioso: la clave está en no solo enfocarse en el talento, sino también en aprender sobre todo lo que rodea la profesión. Desde aspectos legales hasta relaciones públicas y marketing, Héctor enfatiza que ser un músico exitoso implica entender el contexto completo en el que se desarrolla la industria.


    Finalmente, Héctor no solo ha encontrado éxito en su carrera, sino que también ha creado una vida personal plena junto a su esposa e hijos. Ahora radicado en Los Ángeles, trabaja en proyectos que buscan mantener viva la esencia de Maná, mientras crea nueva música original. Su historia es un recordatorio de que el éxito no se mide solo en logros profesionales, sino en la capacidad de crecer, aprender y compartir lo que amas con los demás.

    続きを読む 一部表示
    34 分

Puro Corazónに寄せられたリスナーの声

カスタマーレビュー:以下のタブを選択することで、他のサイトのレビューをご覧になれます。