Artículo de la profesora Delia Steinberg Guzmán extraído del libro “Hoy vi...” https://www.editorial-na.com/product/hoy-vi/
"Hoy vi a Melpómene, la musa de la tragedia, la inspiradora de artistas a todo lo largo de la Historia, la amada y la temida, la imagen acusadora de la vida.
La vi como siempre nos la han pintado, con su larga túnica cayendo a sus pies, con su rostro severo e impasible, con su cetro, su puñal y la máscara trágica en la mano. El cetro hacía de ella la reina absoluta de la existencia, la dueña de los destinos, la que, en mayor o menor grado, tiñe todos los acontecimientos de la vida. La máscara, terrible en su rictus, recordaba las innumerables veces en que todos los humanos hemos contraído nuestros propios rostros, dirigidos por el dolor; había en esa máscara una extraña conjunción, donde se sumaban todos los ojos, todas las miradas, todas las expresiones de todos los hombres… Y la conjunción hablaba, como siempre, de dolor… Y el puñal… era al menos la promesa de poder acabar con las sombras, con las mentiras y el sufrimiento obligado; en manos de Melpómene, el puñal era más dulce y prometedor que la máscara y el cetro de trágica poderosa.
Pero las visiones de este mundo son inestables, y se empañan como espejos de mala calidad… La propia vida, la esencia misma de Melpómene, nos hace perder claridad en las imágenes. Y así fue como mi primera visión de la musa se fue transformando, hasta centrarse por completo en la prodigiosa máscara que llevaba en la mano.”